LA INMORAL E INDIGNANTE PAGA EXTRA A DIRECTIVOS
SANITARIOS
Un pensionista en
el estado español subsiste con la irrisoria cantidad de 500 o 600 euros al mes.
Con esa mísera cantidad económica se paga la jubilación de un trabajador que
puede haber estado trabajando 35 o 40 años de su vida. Y con esa cantidad
ínfima, dicen las crónicas, sobreviven
familias enteras que, sin prestación alguna y en el paro, malviven con la paga
de los abuelos jubilados.
En nuestra
comunidad autónoma canaria, nos informan los responsables de los Servicios
Sociales, morirán dos de cada tres
dependientes en lista de espera que se mantienen a la expectativa de recibir
alguna ayuda y que no llegará. No existe presupuesto para dotar las
prestaciones que deben darse a estos dependientes, enfermos y discapacitados,
ancianos y desvalidos que sufren y esperan la muerte que llega de forma
inhumana.
En temas sanitarios
ocurre casi lo mismo. Pacientes que se eternizan en listas de espera
quirúrgicas, alguno de ellos con patologías oncológicas, a los que les llega la
muerte antes de poderles tratar sus enfermedades. Y otros que siguen a la
espera de poderse realizar estudios y pruebas diagnósticas para conocer el
alcance de sus patologías, algunas de ellas graves y con riesgo vital de importancia.
Pero nada de eso
importa. Son las políticas sociales que nuestro gobierno canario y el estatal,
aplican a sus ciudadanos. Son los mismos gobiernos a los que se les llena la boca
refiriendo que garantizan los sistemas de prestaciones básicas, sanitarias y
sociales, de los ciudadanos que tienen derecho a recibirlas.
Y aluden a que no existe presupuesto económico
para satisfacer estas demandas y cubrir estos derechos sociales, por lo que hay que recortar, hay que meter las
tijeras.
Pero, hete aquí
que, finalizando el año de crisis que hemos padecido, fundamentalmente los
ciudadanos no nos engañemos, sí que existen partidas presupuestarias para pagar
una inmoral e indignante “paga extra” a gerentes y directivos de la sanidad
pública.
En el Hospital
Universitario de Canarias, por poner un ejemplo de lo que ocurre en el resto,
hemos venido denunciando que, según instrucción de la Dirección del Servicio
Canario de Salud de 21 de Marzo de 2012, a los directivos se les abonan unas
cantidades extras, definidos como “complemento de especial rendimiento” y como
“incentivos” y que se reparten, mas o menos, el Gerente, con un total de unos
35.000 euros o el Director Médico con un montante que ronda los 30.000 euros ,
o el Director de Recursos Humanos con casi 27.000 euros.
Este inmoral
dispendio económico que llegan a los bolsillos de estos “directores políticos”
de la sanidad, y solo como incentivos extras, es una desvergüenza de quienes,
ya va siendo hora, deben someterse a un
juicio público por esta indignante forma de repartir, dicen ellos, los escasos
recursos que todos generamos con nuestros impuestos.
Con solo esta “paga
extra”, un jubilado podría vivir 5 o 6 años ya que percibe unos 7.000
euros anuales si recordamos lo que reciben mensualmente. Un escándalo.
Y todo con el
beneplácito de un gobierno que favorece a estas marionetas que mantienen en los cargos directivos y que
actúan como la “voz de su amo”, y que son el escudo que poseen ante la
ciudadanía por sus nefastas gestiones en materias sanitarias y sociales que
para eso están y lo cobran muy bien.
Pero ¿que tipo de
objetivos y rendimientos especiales han logrado estos directivos en los
hospitales que dirigen para merecer, no solo sus altos salarios sino esta
recompensa anual? Mientras tanto, al resto de trabajadores se nos ha suprimido
la paga extra de navidad, se nos han aumentado las jornadas laborales, se han
dejado en paro a miles de sanitarios, a los interinos y eventuales se les
pretende bajar un 20% de jornada y salario….
Y para ocultar lo
que ocurre, desde la dirección del HUC se organizan actos festivos para
celebrar la navidad. Conciertos de timples, de orquesta, visita de bomberos y
policías, inauguraciones de belenes…Es el circo con el que nos entretienen para
ocultar inmoralidades y abusos de poder. Debe ser por eso por lo que cobran
estos incentivos extras Y mientras, algunos trabajadores asistirán, con los
gorritos de Papa Noel, a aplaudir los conciertos en el hall del hospital…
Denigrante, bochornosa, tercer mundista, cutre, casposa la gestión hospitalaria
de nuestros centros sanitarios. Y sus directivos, los responsables.
Carlos
García. Médico. Intersindical Canaria