domingo, 14 de marzo de 2010

ANTE LAS DECLARACIONES DE ANTONIO ALARCÓ, SENADOR POR EL PARTIDO POPULAR Y LOS RECORTES DE SORIA SU JEFE DE FILAS

Constituido en el día de hoy en la ciudad de La Laguna , el Foro Social Canario por la Salud y la Sanidad Pública que integra a diversas asociaciones y colectivos de pacientes, familiares, vecinales, profesionales y sindicales, quiere manifestar su más profundo rechazo a ambas cuestiones, declarando a ambos miembros del PP como P.P.S.P. (personas peligrosas para la sanidad pública).Las opiniones del Dr. Alarcó se suman a otras, que en este momento se están haciendo oír con fuerza y, que tienen como fin el desmantelamiento del sistema sanitario público en el Estado español.

El consejero de Sanidad del Cabildo de Tenerife manifiesta que el sistema sanitario público está al borde de la quiebra y sólo se salvará si se introducen de forma urgente fórmulas de gestión empresarial (Responsabilidad Social Corporativa) con la entrada de capital privado para financiar los hospitales. Otras ideas de su discurso son que Canarias no puede hablar de Sanidad regional sin hacerlo también de la española y la europea y que la Unión Europea por mandato debe implantar el copago, por el que el usuario paga una cantidad por consulta, para transmitir a la ciudadanos que los servicios tienen un coste y no se puede abusar de ellos.

Hace 20 años, el Informe Abril hacía las mismas predicciones, que sin lugar a dudas eran totalmente equivocadas. El tema de la quiebra del sistema es uno de los favoritos de los representantes de los intereses privatizadores.

Su intervención se enmarca en el discurso común del neoliberalismo que plantea para salir de la crisis medidas como privatizar los sistemas públicos, abaratar los despidos y contratar de forma precaria, justo cuando la población está sufriendo altas tasas de paro, que aumentan el nivel de pobreza y de marginación social, lo que se hace muy evidente en nuestra comunidad autónoma.

El Estado español dedica un presupuesto a la sanidad más bajo que otros estados europeos y consigue unos resultados de salud proporcionalmente aceptables . La subida de los costes, que es real, está muy influenciada por la incorporación incontrolada de nuevas tecnologías y medicamentos, como recoge la prensa científica, que en muchos casos son impuestas por la industria y que no aportan beneficios en términos de salud.

No se puede hablar de quiebra sin hacer referencia a las posibilidades de mejorar los ingresos, que pasarían por aportar recursos procedentes del fraude fiscal que es de los más altos de Europa y con los que precisamente se puede y debe aumentar el gasto sanitario y social en justa y necesaria correspondencia con la mayor fragilidad y desigualdad que la crisis económica está provocando en los sectores más débiles.

Existe una evidencia suficientemente demostrada de que los modelos sanitarios basados en el mercado, la competencia o la participación privada en la financiación y gestión de los centros sanitarios públicos conducen a la quiebra del sistema (Reino Unido, Valencia y CA de Madrid), por el incremento de los costes, que llegan a duplicar o triplicar los del sistema público y por el endeudamiento que generan, que multiplica por siete el público. El Dr. Alarcó olvida que las mencionadas comunidades, gobernadas por su partido, ya han introducido modelos de gestión privada y tienen junto con Canarias y Murcia el triste honor de tener los sistemas sanitarios más deficientes del Estado Español.

Cuando el responsable de sanidad del cabildo habla de que el cliente-usuario tiene que ser el centro del sistema, en lugar de hablar de participación comunitaria para que los ciudadanos participen activamente en la gestión responsable de los recursos sanitarios, lo que viene a decir claramente es que paguen para ser atendidos. El copago o tasa por enfermedad no es justo y va a recaer fundamentalmente en los sectores con más necesidades de asistencia y menor renta (pensionistas y mayores de 65 años). Si el ciudadano español visita más al médico que en otros países europeos puede ser porque la esperanza de vida de los españoles es la más alta de Europa o porque muchas consultas son burocráticas, y por tanto hay que aplicar medidas de mejora. La solución no es pagar para ser atendido, y recalcamos que esto se plantea cuando el 20% de la población del Estado está en paro (en Canarias casi el 30%) y cuando la crisis económica ha disminuido los recursos de los ciudadanos. Además, la recaudación de los copagos precisa de la puesta en marcha de un sistema de gestión y administración que es costoso y que aumentaría los gastos de administración y gestión de la sanidad.

Por otro lado el Consejero de Economía del Gobierno de Canarias vuelve a plantear más recortes presupuestarios que sin ningún género de dudas afectarán a la sanidad, educación y servicios sociales. Con ello, en la sanidad, cuando la necesidad de cuidados de salud se incrementa (es bien conocido que la enfermedad aumenta en relación con el paro y la pobreza) aumentará la desigualdad social al dejar una sanidad pública más deteriorada para las clases desfavorecidas y a los sectores sociales con recursos suficientes a la búsqueda de atención alternativa en la medicina privada.

Estamos de acuerdo en que hay que introducir mejoras en la gestión de los servicios públicos, exigiendo transparencia a los gestores y desenmascarando y denunciando a todos los que usan la sanidad pública para incrementar los beneficios del sector privado (en eso también somos líderes en Canarias), pero ahora más que nunca es necesario mantener un sistema público y de calidad, con la participación de la ciudadanía, pues la salud es un derecho fundamental y no podemos permitir que se use para incrementar los beneficios de la empresa privada .

La Laguna, 13 de marzo de 2010.